Como especialistas en la reparación de piscinas de sal, podemos decirte que este tipo de piscinas cuenta con muchas ventajas, tanto para el mantenimiento y limpieza de la piscina como para tu salud.
Elegir la opción salina consigue una mejor calidad del agua, porque se reduce la concentración de productos químicos y es más fácil controlar los niveles de pH. Se evita la irritación en la piel, el cabello o los ojos y se evita el olor y el sabor a cloro. Este tipo de piscinas consigue una mayor protección de la abrasión del pelo y el tacto áspero que deja el cloro, consiguiendo también un bronceado de la piel más natural.
El mantenimiento se hace solo
El mantenimiento de las piscinas de sal se hace prácticamente solo, porque solo hay que añadir sal cuando baje el nivel del agua, en el caso de que puedan originarse pequeños escapes de agua, por ejemplo.
Como expertos en la reparación de piscinas de sal, podemos decirte que es una opción mucho más cómoda y práctica en cuanto al mantenimiento, porque gracias a los cloradores salinos solo deberás reponer un poco de sal para que todo funcione y fijarte cuando el nivel de salinidad esté bajo para reponer con un poco más de sal en el agua.
Las piscinas de sal son una buena opción para el medio ambiente, ya que es más ecológico y no emplea productos químicos. No es necesario manipular o almacenar productos químicos. El coste inicial es más elevado que el de una piscina tradicional, aunque la inversión se amortiza en poco tiempo, porque el mantenimiento es más barato y no necesitas tantos productos para la conservación del agua. El coste de recambio de la célula electrolítica va disminuyendo con la demanda.
No será necesaria la reparación de una piscina de sal de forma frecuente, porque la sal es capaz de evitar algunos problemas comunes, como puede ser el hecho de no acumular algas, es decir, que no es posible que proliferen como sí pasa con las piscinas de cloro.
Bañarse en agua salada transmite muchos beneficios a nuestro organismo, como la relajación, la salinidad y los minerales en la piel, a nivel curativo para heridas o picaduras de mosquito, para la relajación y la recuperación muscular, ayuda a flotar mejor… No destruye los tejidos, porque la sal no es un componente abrasivo, de modo que no deteriora los bañadores como sí pasa con el cloro.
Desde nuestra empresa especializada en la reparación de piscinas de sal, podemos ayudarte a elegir la opción que prefieras y explicarte todos los detalles y ventajas de cada una de las opciones que podemos ofrecerte.